viernes, 2 de enero de 2009

¿Qué hay detrás de algunos personajes de las tiras cómicas estadounidenses?




Popeye el marino es un personaje de las comiquitas conocido por las generaciones desde la década de los 30 en todo el mundo occidental. Todos conocemos la fortaleza de Popeye cuando se comía el contenido de una lata de espinacas. Popeye adquiría una fuerza descomunal que podía derribar a su archienemigo Brutus cuando era sometido a un ataque de celos por las cortesías de Brutus con su novia Rosario. Pero de niños y aún de adultos nunca entendimos ese misterio de obtener fuerzas al comer las espinacas. Jairo Larotta Sánchez(
Aporrea




Popeye el marino es un personaje de las comiquitas conocido por las generaciones desde la década de los 30 en todo el mundo occidental. Todos conocemos la fortaleza de Popeye cuando se comía el contenido de una lata de espinacas. Popeye adquiría una fuerza descomunal que podía derribar a su archienemigo Brutus cuando era sometido a un ataque de celos por las cortesías de Brutus con su novia Rosario. Pero de niños y aún de adultos nunca entendimos ese misterio de obtener fuerzas al comer las espinacas.

Recordamos gratamente que nuestras madres nos mostraban al héroe Popeye para que lo imitaramos en comer espinacas que usualmente nos las daban en sopas que no nos agradaban. Como todo niño rechazábamos las sopas pero cuando nuestra madres emulaban las hazañas de Popeye el marino por su particular fuerza producto de la ingesta de espinacas, nos convencían en tomarnos ese vegetal preparado en sopas y como acompañante de los almuerzos.

Ciertamente ese personaje creado a finales de los años 20 por el dibujante estadounidense Elzie Segar, tuvo un éxito en esa época de inicio del cine mudo cuando las historietas estaban de moda en Chicago, ciudad ésta donde se popularizaron numerosas historietas en los conocidos “suplementos” que llegaron a ser muy vendidos en la Venezuela de los años 40, 50 y 60. En los EEUU nacieron numerosos personajes de las comiquitas dibujadas por los diferentes creadores, en el cual uno de los más famosos fue Walt Disney. En cada uno de esos personajes había detrás una razón para su creación, lo cual en general perseguían los dibujantes era resaltar virtudes o defectos de los humanos en distintos escenarios de la vida real.

No soy experto en historia de esos personajes pero trataré de explicar el origen y razón de algunos de ellos, y lo haré solo para ilustrar a los lectores en la diversidad de la cultura que nos han inoculado de niños por diversos medios, iniciando por las historietas escritas y finalmente con películas del cine sonoro.

Popeye relata en su propio nombre su origen. Es la composición de dos palabras de la lengua de Shakespeare: “Pop” y “eye”, que unidas significan “ojos saltones”. Pues bien, esos ojos saltones ocurren con la ingesta una yerba distorsionada en espinaca, que en la realidad era la marihuana, y que consumían los “marines” estadounidenses cuando les tocaba ir al frente de batalla, para ahogar el miedo que todo joven soldado reclutado era lanzado a la guerra para cumplir el servicio militar y defender la bandera estadounidense en los numerosos frentes de batalla que han desplegado a lo largo de las guerras mundiales y las otra guerras que han sostenido los EEUU en varios continentes desde el siglo pasado hasta el naciente siglo XXI. Todos conocemos como en la guerra de Vietnam de finales de los 60, el ejercito de ocupación estadounidense recibía marihuana para “entusiasmar” a los soldados en esas misiones muchas veces suicidas que enfrentaban en esa nación.

En la primera guerra mundial, los soldados se “entusiasmaban” en su mayoría con la mezcla de la aspirina con el cafecito. Por esa razón en los hospitales de campaña en el frente, hacían grandes colas los soldados para recibir la aspirina, para disminuir la fiebre o el dolor de cabeza. Pero esa era la excusa para recibir el ácido acetilsalicílico en grageas que mezclaban con la poción de café negro y tomaban antes de salir al frente. Otros soldados especialmente los “marines” consumían la marihuana, que les suministraban a los batallones, sea por tierra o por mar, en las diversas misiones de guerra que les encomendaban. Claro, esa acción de entregarles esa yerba a los marines no era legal, por tanto lo hacían sus comandantes muy discretamente. A las tropas del mar les pasaban cortometrajes de aventuras de Popeye el marino, para distraer a las tropas en las largas misiones en alta mar. La novia Rosario era la personificación de las novias o esposas de esos marines que dejaban en casa y que añoraban a través de cartas que les enviaban desde el frente de batalla. Esa es la verdad detrás de ese personaje Popeye.

Otros personajes tienen también orígenes interesantes de conocer. Walt Disney en sus inicios propuso en New York al archimillonario Paul Getty le otorgara un préstamo para hacer una película de largo metraje. Paul Getty quién era uno de los dueños de la petrolera Standard Oil Company, se lo negó alegando que podía perder el dinero anunciando anticipadamente el fracaso del señor Disney. Entonces Walt Disney acudió al alcalde de New Cork para ver si participaba en alguna campaña cívica que esa alcaldía pudiera sufragar. Fue entonces cuando ese alcalde le planteo a Disney la urgencia de convencer a los newyorkinos de aceptar convivir con los ratones y ratas que pululaban en esa ciudad portuaria en las alcantarillas e invadían las residencias de sus habitantes. Genialmente Disney creó entonces el Ratón Miguelito o Mickey Mouse, donde hizo de los ratones unos seres amigables que eran aceptados por los niños en las historietas que narraban casos de casa en la vida real. Sabemos hoy que Mickey Mouse se convirtió en una estrella de los dibujos animados y es uno de los principales personajes del Reino Mágico de Disney en el primer parque llamado Disneylandia o tierra de Disney, ubicado en Anaheim, California. Posteriormente fue creado Disney World en la ciudad de Orlando, Florida, el cual provee a ese Estado de la visita de mas de 20 millones de turistas al año, siendo una de las principales fuentes de ingreso de esa región de los EEUU.

Walt Disney ante la negativa de Paul Getty de prestarle dinero para su película, habiendo observado que su oficina tenía numerosos teléfonos públicos en la sala de espera para evitar tener que pagar las llamadas de los inquietos ciudadanos que esperaban por una audiencia, le dijo: “señor Getty, no volveré a molestarlo para pedirle dinero prestado. Su actitud de falta de colaboración con las necesidades sociales de esa ciudad y especialmente por ser tan pichirre me obligarán a inmortalizarlo en alguna producción que en un futuro realizaré sin su ayuda”. Cumplió su promesa y fue cuando creó el personaje “Rico Mc Pato” que todos conocemos por lo pichirre y avaro que es.

Otros autores crearon personajes que resaltaban por ejemplo defectos de los ciudadanos. Es el caso de Goofy. Goofy o Tribilín es un personaje de ficción creado por Art Babbitt de los estudios de Walt Disney. Es un perro de características antropomórficas y es uno de los mejores amigos de Mickey Mouse. Su primera aparición fue en los años 30 en un corto de animación muestra a Mickey Mouse, el caballo Horacio y a la vaca Clarabella cantando y haciendo un espectáculo de baile. En esta época, los cortos de Mickey y su pandilla animada hacían canciones y números bailados casi rutinariamente. Lo que le daría a esta animación un carácter distintivo fue el debut de un nuevo personaje, cuya forma de actuar serviría como fuente de chiste. Pero destacó el hecho de destacar el defecto de los conductores de automóviles que en la vida real se convertían en seres agresivos detrás del volante, a pesar de ser muy simpáticos como ciudadanos de a pie. Indudablemente tenía un mensaje positivo de explicación de la agresividad de los conductores en las grandes ciudades, sometidos al estrés del tráfico diario. La primera aparición del Pato Donald fue en la animación “Sinfonías tontas y La gallinita sabia”, en los años 30. La apariencia que tenía Donald en esta animación es similar a la actual. Muchos de los cortos de Donald durante el período de guerras fueron películas de propaganda, lanzadas en los años 40. Otros cortos notables de este período incluyen los llamados “cortos de la Armada” (Army shorts), y fueron varias películas que siguieron la vida de Donald en la Armada de Estados Unidos, desde su reclutamiento hasta su vida en un campamento bajo las órdenes del sargento Pete El Negro, pasando por su primera misión comando donde se sabotea una base aérea japonesa.

El personaje Donald comenzó a aparecer en la mayoría de las animaciones del Ratón Mickey como una figura habitual de su grupo con Minnie, Goofy o Tribilín y Pluto. En un cortometraje aparece el personaje de Daisy, novia de Donald. Sus sobrinos Hugo, Paco y Luis hicieron también su aparición en la película “Los sobrinos de Donald”. Durante la Segunda Guerra Mundial, la audiencia esperaba personajes más avasalladores. No es una coincidencia el nacimiento del conejo de la suerte Bugs Bunny, que también fue testigo del ascenso de popularidad del Pato Donald.

De esta manera apreciados lectores, ilustramos los orígenes de esos personajes tan familiares a los niños de las generaciones posteriores (años 50 y 60) y que llegaron a nuestro país como fenómenos de transculturización subliminal, que persisten hoy en día en nuestras mentes. Estas vías de propaganda bajo la ingenua figura de estos personajes, nos transmitieron mensajes y valores ajenos a nuestra idiosincrasia, de la manera más ingenua como es una historieta o una película infantil. Personajes creados en Chicago como Superman, tratan de sustituir la figura de Jesucristo superpoderoso que lucha como justiciero del bien, explicando que proviene del cosmos como hijos de ángeles de otros mundos (Ka El, Jor El) con nombres similares a los arcángeles cristianos cuyos nombres terminan en el sufijo “el” como Gabriel, Rafael, Miguel, y con padres adoptivos (esposos Kent) similares a José y María.

Hoy en día hay muchos y variados nuevos personajes importados de EEUU, de Japón y otros países, los cuales debemos filtrar para evitar que nuestros hijos y nietos reciban mensajes negativos o distorsionados que perjudiquen su desarrollo mental individual y colectivo. Tienen la palabra los educadores y quienes de alguna manera dirigen y controlan las distracciones infantiles que llegan a nuestro país a través de los videojuegos y películas de ficción. Aprovecho para desearles a todos un Feliz Año 2009 lleno de salud y prosperidad y unión con sus seres queridos.

(*): Ingeniero Civil, M.Sc.

jairolarottas@cantv.net