jueves, 15 de octubre de 2009

“LA CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA”

Dolorosamente no es una novela, es la burda realidad, una realidad que produce una sensación tan desesperante, que no se como describir, suplicamos, hablamos y gritamos pidiendo ayuda y los oídos sordos y manos inertes de quienes pudieron haber hecho algo, no lo hicieron; haciendo dolorosamente tangible la cruel sospecha; y más doloroso es cuando de lo que estamos hablando es de seres humanos, mujeres y hombres que atravesamos esas mismas calles y conformamos el entramado societal de esta Valencia querida.
Estamos hablando de las mujeres y hombres que formamos parte de las organizaciones que hacemos vida en la Federación Bolivariana de Cooperativas; quien alberga en su seno a: El Ministerio del Poder Popular para la Mujer y la Igualdad de Género, La Escuela de Formación Socialista e Igualdad de Género Ana María Campos “EFOSIG”, La Misión Madres del Barrio “Valencia”, La Coral de Valencia y VIVE TV, entre otras; organizaciones que trabajamos por forjar una sociedad mejor, una sociedad de iguales, con menos injusticia y donde podamos erradicar la violencia que hoy nos aniquila, queremos un mundo lleno de paz; pero las condiciones objetivas y subjetivas nos señalaban que si ya habían robado en VIVE TV, habían lanzado unas piedras hacia dentro y se peleaban, a plena tarde y de forma feroz, unos malandros en la acera más cercana, pues era casi obvio que necesitábamos SUGURIDAD, SI CLARO QUE SI, teníamos presunción de que algo grave pasaría, y pedimos a gritos ayuda, por correspondencia, con mensajes, con conocidos, “La inseguridad en las adyacencias de la Federación Bolivariana de Cooperativas, era evidente”, bueno y en el Estado Carabobo ni que se diga, no nos apoyaron, no atendieron a los pedimentos y hoy tenemos que lamentar una muerte, quien le da consuelo a su padre, a su abuela, a su familia, quien le devolverá la vida. Yo se que su canción era otra, pero solo puedo pensar en: “Adiós en dolor mayor, canción, en dolor mayor (bis), ¿En qué traste se perdió la canción y la sonrisa?, cuando la noche quebró sus brazos sobre la vida.

Hoy cae uno de los nuestros, de nuevo la negligencia y el vandalismo cobran otra vida, un muchacho de 24 años, Daniel Valenzuela, pudo haber sido un cineasta, un Ministro de la Cultura, o lo que sea -a lo que sin dudas tenía derechos- pero no fue así, y muere víctima de unas puñaladas que recibe por querer defender lo suyo, fue un trabajador de VIVE TV, y el dolor más grande es que se pudo haber evitado, sólo hacia falta Vigilancia, alguien que cumpliera las funciones para las cuales fue elegido.

O quizás aquellas heridas mortales recibidas el jueves en la madrugada no hubiesen segado su vida, si logra llegar a manos de médicos fieles al juramento Hipocrático que debe guiar su ética profesional; no Daniel no logró con esa suerte, no conforme con ser victima de la violencia que esta acabando con esta ciudad, va a parar al Hospital Central y la “negligencia médica” hace su asqueroso trabajo, pues atendiendo a medias, a quien deberían salvar la vida, surge como corolario la muerte. Y surge otra pregunta ¿Cuantos o Cuantas más tenemos que morir?



Dra. Elena Ibarra
Directora de Estado
Ministerio del Poder Popular para la Mujer
y la Igualdad de Género

2 comentarios:

pcvrojo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
pcvrojo dijo...

Murió Mercedes Sosa, la incomparable, la voz de nuestro dolor, la energía de nuestras luchas, la bandera de quienes peleamos por las injusticias vividas, Mercedes La Grande.. La Mujer combativa, luchadora, no existen palabras que puedan describir lo que sentimos por tu ausencia, sabemos que te sembraron, pero aún así lloramos. las mujeres del mundo te amamos, tus cantos nos sensibilizaron, tu lucha nos concientizo, tu voz nos atropó por siempre.
MERCEDES LA GRANDE
EMIB.